Al igual que en humanos, el hipo en perros se da de forma espasmódica. Esto es como resultado de ciertas acciones, tratándose de una reacción involutaria, con una prevalencia muy común. No es nada peligrosa aunque si se prolonga en el tiempo puede llegar a ser molesta para el perro cachorro o adulto. Es por esto que hemos recopilado información relevante y consejos para ayudarte a tí y tu peludo. Vamos a hablar de las causas y soluciones del hipo en perros para que así estés más tranquilo y puedas ayudar a tu cachorro.
¿Qué es el hipo?
Médicamente se define como una contracción involuntaria y compulsiva del diafragma, la cual se repite en intérvalos más o menos regulares. Esta obliga a los pulmones a expulsar el aire de forma brusca y normalmente entrecortada. Es común en todas las especies de mamíferos, por lo cual, el hipo en perros en bastante común.
Causas del hipo en perros
Las causas del hipo en perros pueden ser varias y provenir de distintas fuentes. Para solucionarlas o evitar el hipo en perros, debemos tener conocimiento de dichas causas. Vamos a enumerarlas:
- Beber agua o comer muy rápido. Cuando el animal come muy rápido, traga un exceso de aire junto a la comida. Ese mismo aire empieza a salir del estómago cuando se inicia la digestión. Puede salir por dos vías, con flatulencia o con hipo. Educar a tu perro a comer más despacio y repartiendo sus porciones hasta en 5 más pequeñas, ayudará a espaciar la ingesta y minimizar el aire ingerido.
- Desórdenes estomacales. Si tu perro rechaza algunos alimentos, probablemente sea el estómago el responsable. Revisa si ha ingerido algo que no debía o si ha comido algún producto caducado. En caso de duda no dudes en acudir a un profesional veterinario.
- Demasiado frío. Mantener la temperatura corporal mientras descansan es muy importante para los perros. Disponer de un espacio caliente y cómodo ayudará a evitar el hipo. Las razas más pequeñas son las más afectadas por esta causa y hay que tener especial cuidado en los meses más fríos del año.
- Miedo, ansiedad y nervios. Algunas circunstancias que puedan molestar o causar impacto en tu perro, incluso asustarlo, pueden desencadenar un episodio de hipo. Trata de identificar que situaciones le asustan o ponen nervioso, le provocan estrés o miedo. Eliminándolas mejorarás su comportamiento y estado de ánimo.
¿Cómo puedo quitar el hipo a mi perro?
Esta es una de las preguntas más comunes en cuanto a hipo en perros, por suerte la respuesta es sencilla. En función de lo que esté causando el hipo, existen una variedad de soluciones muy prácticas que evitarán acudir a un veterinario. Realmente el hipo es inofensivo, siempre que no se prolongue de forma excesiva, no más de un par de horas para los casos más agudos. En la mayoría de casos desaparece por si solo, pero si notas que tu perro empieza a encontrarse incómodo, ponerse nervioso, o si todavía es un cachorro y presenta un ataque de pánico, puedes tomar alguna de estas medidas:
- Dale un pequeño susto. No funciona al igual que con las personas, pero forzarlos a que cambien de posición ayudará a que cambien el patrón de respiración. Lo puedes conseguir sobresaltándolo o jugando con una pelota o mordedor.
- Ofrecele algo de comida o agua. Al igual que la opción anterior, hará que cambie de posición y con ello el patrón respiratorio, con ello puede que el hipo desaparezca.
- Báñalo. Aunque a tu perro no le encanten los baños, el hacerlo puede ayudarle a salir de la rutina y servirle como distracción. Cansando al perro podemos influir en que el organismo cese el reflejo involuntario del hipo.
- Dale calor. A veces el hipo puede ser producido por el frío. De ser este el motivo, abrigarlo o ponerlo cerca de una fuente de calor, puede ser suficiente para terminar con el episodio de hipo.
¿Qué pasa si un perro tiene hipo?
Como ya hemos avanzado, no hay de que preocuparse del hipo en perros, siempre y cuando sea algo ocasional y no se prolongue excesivamente. Los espasmos involuntarios en perros provocados por hipo, suelen desaparecer en unos pocos minutos, los casos más extremos pueden tardar un par de horas en hacerlo. No provocan en ningún caso secuelas o lesiones. Hay algunas razas, como el Bobtail o el Lobo Checoslovaco que tienen más prevalencia.
En caso de que los episodios se prolongasen más de unas horas o se presenta de forma persistente, es recomendable acudir a un veterinario. Estos episodios si van acompañados de cambios de conducta, puede que sean síntoma de alguna clase de problema respiratorio o digestivo.
Observar a tu cachorro, anotar cada cuanto tiempo tiene las convulsiones por el hipo y cuanto duran estas, es buena información que dar al veterinario, en caso de tener que acudir. Recuerda que es recomendable hacerlo si dura más de dos horas o es algo constante en el perro. Observar a tu mascota, aunque no se trate de una afección grave, puede ayudarte a prevenirla de otras más dolientes como la leishmaniosis o la tos de las perreras.
¿Para que sirve el hipo?
El hipo en perros no suele representar un problema de salud por el que tengamos que preocuparnos. Este reflejo espasmódico puede ayudar a los perros a liberar gases acumulados en el estómago. Con esto se limita la posibilidad de que el esófago sufra irritación y permite recuperar la coordinación del movimiento del diafragma.
Es comprensible que te preocupe ver así a tu amigo peludo, pero una vez descartado cualquier posible problema digestivo o respiratario, aprovecha para jugar con él y seguro que en unos minutos se ha olvidado del hipo.